Llegó el día: Google penaliza a las webs no responsive
“Soluciona los problemas de usabilidad en móviles en tu sitio”. Esta era la frase que lanzaba Google el pasado 27 de febrero para avisar a sus usuarios: si tu web no está adaptada a los smartphones –decía el gigante de Internet- caerá en las posiciones del buscador.
Google siempre ha valorado las versiones responsive, pero ésta es la primera vez que ha puesto una fecha específica para la actualización de su algoritmo: hoy, 21 de abril. El riesgo para las webs que no estén preparadas es notorio, ya que el “castigo” consiste en desaparecer en las búsquedas móviles. Quedar en el olvido postergado a las últimas páginas del buscador, donde apenas llega algún internauta.
¿Es mi web responsive?
Google ha facilitado una herramienta para comprobar si una web está optimizada para móviles, es decir, si la página está diseñada de tal forma que pueda visualizarse correctamente desde distintos dispositivos móviles.
El diseño responsive consiste en redimensionar y ubicar los diferentes elementos de la web para que se adapte al ancho de una tablet o de un Smartphone (se aconseja, por ejemplo, descargar el espacio de elementos inútiles y tender a formas simples). Se valora, además, si los contenidos y las imágenes están dispuestos de manera fluida: de esta forma se reduce el tiempo de desarrollo y aumenta la viralidad y la duplicidad de los contenidos.
El aumento del tráfico a las webs desde dispositivos móviles continúa progresivamente en aumento (sobre todo en España, donde el índice de penetración de los smartphones es uno de los más altos de Europa). Por eso era recomendable hasta ahora prepararlas para que los usuarios tuvieran una experiencia de navegación mucho más amena. A día de hoy, 21 de abril, la decisión de Google convierte esta recomendación en una obligación. Eres responsive o desapareces.